Los incendios forestales en la provincia de Guadalajara vuelven a dejar patente que los recortes sí empeoran la prevención de incendios.
Hay que esperar a ver cuales son las repercusiones
concretas, las cifras definitivas, que superarán las 3000 hectáreas y que han
afectado al Parque Natural de la Sierra Norte de Guadalajara, las causas
concretas de cada incendio, ..., pero hay unas condiciones comunes a todos ellos;
viento, calor -lo normal en verano- . Y en común también los pocos medios ahora
y, más importante en la prevención, en invierno. Y como agravante una mala decisión, quitando
medios cuando se da por controlado el incendio de Aleas que luego se reaviva.
Afortunadamente, aunque el incendio ha devorado pastos,
cosechas y alguna zona de bosque no ha afectado significativamente a viviendas en los diversos pueblos que fueron desalojados y ha sobrevivido el
proyecto autogestionado de Fraguas
Sería tremendamente oportunista decir que no se ha tenido
precaución, que no se han empleado los medios necesarios… si no se hubiera
dicho mil y una veces.
Por orden cronológico, en cuestión de incendios forestales
en Guadalajara siempre tenemos que volver a 2005, cuando 11 trabajadores
murieron combatiendo el incendio de la Riba de Saelices. En aquel momento se
avanzó en prevención (si es que se puede decir que es preventivo algo que se
pone en marcha después de 11 muertes).
Izquierda Unida hacía un análisis bastante pormenorizado teniendo en cuenta el
abandono del mundo rural, el tipo de vegetación y el retroceso de la ganadería
extensiva, puesto que la prevención no sólo debe consistir en más retenes y más
medios, que también.
En 2012, con motivo del incendio en Checa y
Chequilla, afectando entonces al Parque Natural del Alto Tajo, desde la UJCE poníamos en
valor la lucha de las y los trabajadores por sus condiciones de trabajo y la
prestación eficaz del servicio en contra del ERE de GEACAM y denunciábamos los recortes.
El ERE en GEACAM merece mención aparte. Desde que los
recortes dieron el pistoletazo de salida en Castilla-La Mancha el 1 de
Diciembre de 2011, apenas 10 días después de las elecciones generales, la
empresa pública GEACAM ha estado más preocupada de reducir plantilla, medios,
meses trabajados, dividir a las y los trabajadores y su representación sindical… para cuadrar unas cuentas a la baja que por ofrecer un buen
servicio de prevención de incendios. El ERE se ha combatido desde la movilización y la reclamación judicial, pero GEACAM sigue adelante.
Y apenas una semana antes del inicio de los incendios, CCOO denunciaba que GEACAM va a acabar con todos los contratos fijos. Las y los
trabajadores de los retenes y la gente del mundo rural siempre repiten que los
incendios se apagan en verano. Pues bien, eso, sin contratos fijos todo el año,
va a ser complicado.
Lo que es evidente es que el gobierno regional y la empresa
pública GEACAM están más preocupados por recortar, por cerrar sus cuentas que
por la prevención de los incendios, la calidad en el empleo y las posibilidades
de vida en el medio rural.
Tal y como decíamos en Enero, con el ERE en GEACAM el
Gobierno regional atacaba a la vez a los
derechos de la clase trabajadora y la preservación de nuestros montes y el
medio ambiente.
Su modelo laboral, paro y precariedad, salarios a la baja y
más explotación.
Su modelo ambiental queda resumido en Villar de Cañas y el
ERE en GEACAM. Cementerio Nuclear concebido como ingresos, prevención de incendios concebida
como gastos.
Ahora más que nunca ¡Bomberos GEACAM en Lucha!.
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